🐱Cuidados del gato Siamés

Conoce sus patologías y cómo cuidarlo correctamente

Se trata de una de las razas de gato que goza de mejor salud, lo que no significa que haya que prestar especial atención a algunas patologías que puedan presentarse, sobre todo a una edad avanzada.

Hoy te lo explicamos en éste artículo.

Cuando son jóvenes, debemos prestar especial atención a problemas respiratorios derivados de infecciones del tracto respiratorio superior como inflamaciones nasales y tráquea, algo similar al catarro en los humanos.

También es más frecuente que en otras razas el estrabismo, caracterizado por estar los ojos orientados en distinta dirección, aunque en ningún momento les afecte a la visión.

De origen genético, podemos encontrarnos la porfiria, que es una enfermedad de tipo metabólico, la cola de cerdito, en forma de sacacorchos, la hidrocefalia o hinchazón de la cabeza y la enfermedad vestibular, la cual afecta al equilibrio del gato.

Todas éstas enfermedades se pueden prevenir intentando ser selectivos en la cría de éstos animales.

Cuando envejecen, en el caso de las gatas puede haber problemas de tumores en las mamas, por lo que deberemos de vigilar cualquier tipo de alteración de las mismas.

A veces también aparecen problemas degenerativos de retina.

 Y otras de las enfermedades a las que debemos prestar gran atención son la amiloidosis hepática y la miocardiopatía hipertrófica.

Tienen también cierta tendencia a acumular sarro en la dentadura, por lo que prevenirlo mediante el cepillado diario será lo mejor.

Pero no sólo pueden padecer enfermedades físicas, sino también psíquicas. Al tratarse de animales muy sociales y enérgicos, pueden padecer enfermedades de tipo obsesivo compulsivo, llegando a acicalarse de forma tan repetitiva que pueden perder el pelo de ciertas partes del cuerpo y a acumular pelo en el interior del intestino, lo que puede desencadenar un problema de obstrucción intestinal.

Para evitar que se aburran o problemas de ansiedad, es conveniente no dejarlos mucho tiempo solos, a veces buscarles un compañero puede ser la solución si no podemos evitar tener que salir de casa.

En cuanto a la liberación de energía podremos arreglarlo jugando con ellos y dándoles suficiente espacio para saltar y correr.

Son animales muy longevos que pueden llegar a vivir hasta los 20 años.

El pelaje del siamés no necesita demasiados cuidados; con dos cepillados a la semana será suficiente para mantenerlo lustroso y eliminar el pelo muerto.

Y en cuanto a la alimentación, cualquier pienso de alta gama, será apropiado para él, pues no son gatos que tengan problemas con la alimentación. Ellos mismos suelen administrarse la cantidad que les conviene.

Si os habéis decidido por poner un Siamés en vuestra vida, enhorabuena, no os defraudará y llenará vuestro hogar de amor y cariño, aunque recordad, que dos serán mejor que uno.