🐱¿Qué es la rinotraqueítis felina?
Una enfermedad muy común y a veces peligrosa
Se trata de una patología que afecta a los animales principalmente durante el invierno.
Y cursa con daños en las vías respiratorias altas (conjuntiva, mucosa nasal, faringe y tráquea), y en algunas ocasiones si no se trata a tiempo puede llegar a provocar bronquitis o bronconeumonía.
Los virus responsables de la enfermedad pueden ser; el calcivirus felino o el herpesvirus felino.
SINTOMATOLOGÍA
- Secreción nasal con obstrucción de las fosas nasales.
- Descarga ocular mucopurulenta.
- Fiebre.
- Apatía.
- Estornudos.
- Tos.
- Dificultad para respirar.
- Falta de apetito.
- Úlceras bucales.
- Goteo de orina al terminar la micción.
¿CÓMO SE CONTAGIA?
Los gatos se contagian unos a otros mediante las secreciones oculares o nasales, y sobre todo a través de las gotas de saliva que esparcen al estornudar. El contagio puede producirlo directamente el gato enfermo o bien puede deberse a objetos o personas que hayan estado en contacto directo con el animal infectado.
Los gatos que hayan padecido la enfermedad se convierten en portadores, a pesar de que ya no tengan ningún síntoma.
Cuando ha sido causada por el calcivirus el tiempo de contagio es más breve aunque continuo, y cuando se ha debido al herpesvirus, el gato podrá contagiar durante el resto de su vida la enfermedad, aunque sólo durante breves periodos de tiempo.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico de ésta enfermedad se basa en el cuadro clínico, o lo que es lo mismo, en los síntomas claros de la enfermedad.
También pueden realizarse análisis de las secreciones oculares, saliva o sangre que confirmarían el diagnóstico.
TRATAMIENTO
El tratamiento se realizará mediante antibióticos, antiinflamatorios y reposición de líquidos en caso de deshidratación.
Además deberán limpiarse convenientemente las secreciones, manteniendo libres de mucosidad los orificios nasales y los párpados libres de fluidos.
En el caso de que tenga úlceras en la boca será necesaria una dieta blanda.
El gato deberá guardar reposo durante algunos días en un lugar cálido y confortable.
EVOLUCIÓN
La mayoría de los gatos evolucionan favorablemente con el tratamiento adecuado, aunque pueden tardar semanas en recuperarse del todo.
Si no han recibido la medicación a tiempo ni los cuidados necesarios, la enfermedad se puede hacer crónica, e incluso puede acabar con la vida del animal.
PREVENCIÓN
La prevención más eficaz es mediante la vacunación. Ésta se administrará a los gatitos en dos dosis, y una vez son adultos se les vacunará anualmente.
Al ser una patología altamente contagiosa, debemos evitar que el gato enfermo esté en contacto con otros sanos. Y nunca compartir bebedero y comedero con otros animales.
Además en el caso de que hayamos estado en contacto con un gato enfermo, deberemos limpiar nuestra ropa y manos antes de acercarnos a otros animales sanos.
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