🐶Perro trufero

El buscador del "oro de bosque"

Las trufas son unos hongos que están bajo tierra, y que viven en simbiosis con algunos árboles como el roble. Se utilizan en la cocina, sobre todo en España, Francia e Italia desde hace mas de 3000 años. Son muy cotizados por potenciar el sabor de las comidas a las que se les añade.

Y gracias al olfato de los perros, éste "oro de bosque" puede ser localizado.

 

Antiguamente, se utilizaban cerdos para la búsqueda de éstos hongos, pero desde hace varias décadas se vienen utilizando perros especialmente adiestrados, puesto que a diferencia de los cerdos, éstos difícilmente se comen las trufas cuando las encuentran.

Prácticamente, cualquier raza de perro o mestizo puede ser adiestrado para la búsqueda de trufas, pero hay una raza que destaca especialmente, es el Lagotto Romagnolo, creado en su día para la caza de aves, hoy es el rey indiscutible para ésta tarea.

Aunque es cierto, que en general, los perros dedicados a la caza, por su  instinto predatorio son más proclives a la distracción cuando ven cualquier animal en el campo, lo que dificulta la tarea de búsqueda de hongos.

También se han utilizado labradores y dachshund con muy buenos resultados.

Lo que es imprescindible para que un perro sea un buen buscador de trufas, es que tenga un olfato muy fino, sea tranquilo para no distraerse, y tenga un buen nivel de obediencia.

Para enseñarles ésta disciplina, será importante que se trate de un perro al que le guste el juego, puesto que se les adiestra mediante una pelota impregnada en aceite de trufa.

El adiestramiento, es conveniente comenzarlo durante una edad muy temprana.

Los perros truferos, pueden llegar a recolectar entre 1 kilogramo y 3 kilogramos diarios de trufas.

En países como Francia o Inglaterra, se intentaron crear razas específicas para esta labor a partir del caniche, pero no llegó a termino por la llegada de la Segunda Guerra Mundial.

En España, se utiliza mucho un perro de rasgos y algunas características similares; el Perro de Agua Español.

En algunos países, la búsqueda de trufas se ha convertido en una disciplina canina, y se realizan concursos y campeonatos.