🐱 Azul ruso
Conocido por su procedencia como"el gato Arcángel"
Hoy vamos a hablaros sobre una de las razas de gato de mayor éxito. Os contaremos cuál es su misterioso origen, su exótico aspecto, su inconfundible carácter y los cuidados que necesita para estar en plena forma.
Se cree que el Azul ruso ya existía en el siglo XIII. Posteriormente en 1875 unos marineros mercantes trajeron los primeros ejemplares desde la ciudad rusa de Arkhangels (motivo por el que también son conocidos como arcángeles) a Inglaterra, y tiempo después, a principios del siglo XX comenzó a difundirse en EE.UU.
Aunque actualmente todo el mundo lo conoce como Azul ruso, anteriormente tuvo otros nombres que no dejaban clara su procedencia como; Azul de España, Maltés o Azul Akhangels por lo que muchos estudiosos dudan todavía de su auténtico origen.
Éstos gatos no siempre fueron apreciados como mascotas; en su país de origen fueron criados para utilizar su hermosa piel para la confección de ropa y complementos dada su textura similar al pelo de la nutria y a su excepcional color metálico.
Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial, el Azul ruso estuvo a punto de desaparecer, teniendo que recuperarse posteriormente cruzando los pocos ejemplares que quedaban, con gatos de raza Siamés para de ésta forma evitar la endogamia.
En 1967 fué fundado el primer club oficial de la raza, siendo reconocida oficialmente por todas las asociaciones felinas.
El Azul ruso es un gato mediano con un peso que oscila entre 4,5 y los 6 kg. Es un gato de osamenta delgada y de estructura ligera y flexible, pero también con una musculatura fibrosa.
Sus extremidades son largas y delgadas, los pies pequeños y redondos.
La cola es ancha en la base, larga y delgada, estrechándose en la punta.
La cabeza está proporcionada con el resto del cuerpo. Tiene el hocico de mediana longitud, la frente alta y plana, nariz recta y mentón fuerte. Los labios y la trufa siempre presentan un color gris oscuro, mientras que las almohadillas pueden ser grises o rosas.
Las orejas grandes, largas y de forma triangular tienen la punta roma y están bien separadas entre sí.
Los ojos son grandes, bien separados, ligeramente oblicuos y de color verde intenso. Aunque los cachorros los tienen amarillos hasta los cuatro meses de edad, intensificándose después hasta adquirir el característico tono verde de los adultos.
El manto es doble, con una capa externa fina, suave al tacto y brillante, y una capa interna semejante a la lanilla, responsable de dar un aspecto afelpado al manto. El color debe ser siempre el azul, preferiblemente claro con tonos plateados, siendo similar al color del acero.
El Azul ruso es un gato de carácter equilibrado, tranquilo, juguetón, cariñoso y casero, ya que incluso los machos en época de celo no tienen tendencia a abandonar el hogar.
Además es un gato muy inteligente, al que le gusta observar para aprender nuevos trucos como abrir puertas o ventanas, por lo que debemos tener cierta precaución.
Es un gran cazador y gusta de seguir a su amo en todo momento, incluso cuando éste sale de casa a pasear.
Con los extraños es desconfiado al principio, hasta que éstos se ganen su confianza. No tolera muy bien la presencia de otras mascotas debido a que son muy celosos con sus dueños, sobre todo las hembras.
Les gusta el orden, la limpieza y la rutina, y odian el ruido y los ambientes caóticos, por lo que prefieren la compañía de niños mayores a la de los pequeños.
CUIDADOS Y ALIMENTACIÓN
El Azul ruso es un gato duro y resistente, y en principio no tiene predisposición a padecer ninguna enfermedad.
Lo único que debemos vigilar es la alimentación, ya que es un gato con un apetito muy voraz y puede ponerse obeso. Para que ésto no suceda hay que controlar la cantidad de alimento que le damos, e intentar que incluya carne o pescado, que sea variada e incluso le podemos dar comida casera.
También se le debe administrar malta con regularidad, ya que es un gato que suelta mucho pelo y si se lo traga le puede llegar a provocar una obstrucción intestinal.
Para eliminar el pelo muerto y evitar que pase a su aparato digestivo, podemos peinar a contrapelo el manto con un cepillo todas las semanas, y con más frecuencia en la época de muda.
Si es un gato que sale al exterior, deberemos llevar de forma rigurosa las vacunaciones y desparasitaciones, ya que al tener contacto con otros miembros de su especie y con presas tiene más posibilidades de contraer enfermedades.
También es importante conocer que los cachorros de ésta raza no pueden ser separados de la madre hasta que tengan 70 días y hayan sido destetados y vacunados.
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